No soy muy fan de David Cronenberg. Creo que nunca he llegado a grandes éxtasis, por exceso de amor mío a una visceralidad emocional a flor de piel que quizás Mr. David no era el adecuado para darme, sin embargo respeto y admiro tanto su personalísimo universo que cuando me ha parecido que se desdibujaba peligrosamente desde "Una historia de violencia" a "Promesas del Este" acabando en "Un método peligroso" (devorada por la plúmbea escritura de Christopher Hampton), me he ido desinteresando.Y eso que no pocos siguen viendo nítidas sus huellas.
"Cosmopolis" supone , al menos a mis ojos, otros no estarán tan de acuerdo, el regreso al Cronenberg más puro, de alguna manera profundamente referida a eso que llaman los que saben "el cine de la nueva carne", bueno, tampoco tengo "background" suficiente como para asegurar o no que puede adscribirse o no a esa etiqueta, pero sí está más cerca de obras como "Crash" (una película gélida y magistral al mismo tiempo, como pocas). Y quién mejor para ilustrar esta obra que la adecuadísima presencia de Robert Pattinson.
El personaje Eric Packer, sobre una novela de Don De Lillo (cinéfilo empedernido), ese cacho carne podrido de dinero, desubicado y alienado del mundo, obsesionado por la crisis del yuan, su corte de pelo y su próstata asimétrica, incapaz o imposibilitado de poder mantener una relación física con su también millonaria esposa, otra androide como él, con aspecto de muñequita, que lo rechaza de pleno carnalmente pero está dispuesta a ayudarlo económicamente.
"Cosmopolis" está estructurada sobre diálogos de Packer con varios personajes de su entorno. Algunos diálogos se me hicieron larguísimos, sobre todo hacia la parte final de la película, y me parecieron mejores los que aluden de forma más directa a las autistas relaciones de Packer con su entorno que los relativos a un determinado "estado de las cosas" o a una enunciación de las absurdas preocupaciones de la clase dirigente que representa Packer.
Porque ese "estado de las cosas" me parece mucho mejor definido por el contraste visual entre el convulso mundo exterior y la limusina (otra vez una limusina, como en el genial Carax). El texto, que es algo durillo e irregular, muy irregular, en las fascinación que suscita (ojos como platos o tremendo sopor), pero no mamporrea al Cronenberg director y resulta admirable cómo en la película, de forma puramente visual, se mascan vívidamente estos tiempos en los que el titubeo de un ministro de economía durante una rueda de prensa decide las vidas y la suerte de muchísimas personas. Nunca fue Cronenberg tan actual o finalmente el destino nos ha alcanzado.
De Cronenberg te recomiendo Spider, creo que es el perfecto equilibrio dentro de su filmografía. Y coincido contigo, vuelve a sus orígenes, pero se trata de identificación ya que la obra es de De Lillo y se ha pegado a ella, aunque él le da puesto su toque como tenia que ser. Buena película, me gusta Cronenberg, creo que es interesante y muy fiel a la idea de un cine personal, y eso siempre es meritorio, la temática es muy actual pero siento que Cronenberg aun así no está pensando políticamente, yo creo que le ha atraído más la extravagancia de las formas, si bien tampoco creo que se dedique a algo sin asumir el mensaje. Un abrazo.
ResponderEliminarCierto, tengo que revisar "Spider", que la tengo lejana. No sé si Cronenberg pensaba políticamente. El caso es que en España estamos muy sensibles y lo vemos en Batman, en Cronenberg, en todo...
ResponderEliminarUn abrazo
Yo doy casi por defenestrado a Cronenberg ya y bien que me duele porque se trata de un director que ha hecho muy buenas películas desde el principio de su carrera, por muy pobres que fuesen.
ResponderEliminarLa anterior "A dangerous method", y esta me parecen lo peor que ha hecho, dos films en los que no me creo nada, sin vida ni ritmo, tan asépticos e innecesarios que cuesta entender sus motivaciones, salvo que le haya pasado lo que a Wenders y haya terminado pareciéndose él mismo a sus personajes. No veo la fría exactitud de antaño, ni el misterio, todo parece equivocado, falso, fuera de tono, estrambótico y nada extraordinario.
El Cronenberg perturbador de "Rabid" (sin necesidad de grandes actrices, con una reina del porno como protagonista), "Dead ringers", "eXistenZ" o "Videodrome" parece que tistemente se ha terminado.
A mi me parece una "Patada de película", llena de retórica excesiva, subrayados ,metáforas "pijas", ni ambiente Cronembergriano por ningún lado. Tenía muchas expectativas en que Cronemberg hubiese dado un paso, largo, hacía atrás, pues sus ultimas películas aunque me han gustado bastante, tampoco es el Cronemberg, como dice el Coment anterior e Videodrome ni siquiera el de EXistenZ.
ResponderEliminarAún así era de obligada visión.
Saludos
En mi opinión el Cronenberg brutote de antaño, desde "Rabid" hasta "Crash", ahora no pegaría ni con cola, es un tipo de cine que tuvo su contexto y su época. Es imposible pedirle que haga las mismas películas que entonces. Francamente, "Cosmopolis" me parece muchísimo mejor que las tres últimas, es cierto que es un poco pija, una novedad en Cronenberg, pero a mí sí me da la impresión que sigue siendo inequívocamente suya.
ResponderEliminarOs leo, os leo. Bueno, a mi no me ha desagradado tanto, me ha gustado bastante. Podría decir que quizás a la segunda se me caiga, pero es que tampoco imagino una segunda vez.
ResponderEliminarSaludos
Cronenberg es el MEJOR DIRECTOR DE CINE DE TODOS LOS TIEMPOS.
ResponderEliminarEl que no entienda su fascinación por las capas más putrefactas de la humanidad, no ha comprendido de sus espectros.
Aquellos capaces de unificar la acción con la contemplación, saben vivir bajos sus turbulencias.
Por favor, este tipo de comentarios fírmenlos, aunque sea con el nombre Artur Mas.
ResponderEliminar