lunes, 6 de enero de 2020

LAS NOCHES DE CABIRIA

De la revisión muchos años después de "Las noches de Cabiria" (Federico Fellini, 1957) me surgen un par de asuntos notables. Primero que sigue siendo una película extraordinaria, desde el primer minuto a ese clímax final en el acantilado con esa luz espectacular que parece sacada de El intendente Sansho, recorrida por la música de Nino Rota, siempre coautor de estas  obras mayúsculas

Segundo que me está pasando con casi todos, Godard, Lang, Ford...bueno, creo que no se salva nadie, los limites entre las supuestas "etapas" con las que aprendimos a estos directores cada vez saltan más por los aires. 

Esta película será todo lo neorrealista que se quiera pero en su fluir de personajes, situaciones, en su sentido de la observación, del detalle y en su retrato impresionista de aquella Roma aquí está ya La dolce vita en todo su esplendor, y otras pelis como La notte brava, menos memorable pero igual de poderosa en su implantación de esa mitología de la Roma nocturna. 

Tercera cosa, quizás me despierten ahora muchas más dudas, parecidas a las que tuve a la primera con La strada, acerca de la interpretación de Giulietta Massina, demasiado estudiada, demasiado calculada en cada uno de sus ademanes y mohínes, demasiado deudora de Chaplin, pero claro, yo qué sé, tampoco estoy seguro de que una interpretación más natural hubiese funcionado ni soy más listo que Federico y ella.Y esa medio mirada en el plano final a la cámara, cronológicamente entre Harriet Andersson y Jean Seberg, hace que se lo perdone todo.


2 comentarios:

  1. Yo distingo dos etapas, una en la que sus películas me encantan, y otra en las que hay de todo.Esa primera etapa tiene sus primeras películas, que encadenas cuatro o cinco que me parecen antológicas, como aquella racha de De Sica. Después me sigue gustando mucho, pero la racha a veces se rompe o no todo en todas sus películas me gusta. Esta que comentan está mi Olimpo de las mejores, junto con La Strada.

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  2. Son mucho más equilibradas y sólidas pero lo "felliniano", su leyenda, su singularidad quizás estén en las irregulares.

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