

Con los años cada vez aprecio o valoro más, sobre todo gracias a la disciplina que practico como titulado, el conocimiento fundamentado académicamente, riguroso y metódico del profesional. Aún así fue una excelente iniciativa, (cuyo ejemplo no ha cundido porque no se habrá encontrado a las personas, los espacios y las motivaciones, no es necesariamente una crítica), que especialistas como Rafa Morata encontraran la posibilidad de no guardar esos conocimientos para entorno inmediato y en el mejor de los casos foro de internet y pudiese ofrecerlos en un espacio público físico, más cuando estos los ocupan en muchas ocasiones personas escandalosamente desinformadas que imparten asignaturas de cine basándose en manuales que tienen 50 años a sus espaldas cuando no en anecdotarios de periódico dominical (hay programas docentes universitarios que da vergüenza leerlos). Fue una filmoteca la que ofreció esa oportunidad pero podría haber sido, eso mismo, una universidad, una televisión pública...

Hoy en día esas voces muy especializadas no profesionales se encuentran básicamente en internet, voces entre las que quiero aclarar que nunca me he contado (a pesar de que el conocimiento amplio, una forma de escribir más que aceptable para estos tiempos y la pasión me hayan otorgado tribunas radiofónicas, universitarias, impresas o filmotequeras, mi dispersión me aleja de la enorme especialización que puede leerse hoy en día). Hay una enorme fisura todavía entre las tribunas públicas físicas e internet. Hay una importante cantidad de blogs, perfiles de facebook, foreros, contribuyentes a revistas electrónicas etc etc que merecerían la mayor de las atenciones de los investigadores del audiovisual y merecerían la conquista de un mayor número de tribunas físicas.

Precioso y emocionante texto, Sergio. Muy buena reflexión sobre voces especializadas (o no) de uno y otro lado.
ResponderEliminarNosotros a seguir disfrutando del cine y divulgándolo a nuestra manera: imperfecta, pasional, amateur, con mayores o menores lagunas, con tics, con escoraciones... y sobre todo cercana y respetuosa tanto con este Arte como con quien voluntariamente quiere frecuentar nuestras "parcelas" de cine.
Un fuerte abrazo,
Rafa.