La primera pregunta que surge al ver esta película (de gran éxito actual y venidero, quizás excepto en España, país con unos desorbitados e ignorantes prejuicios cinematográficos) es por qué es muda. Porque el cine mudo no es exactamente un tipo de cine, como se le suele tratar, sino más bien una circunstancia o una etapa en la historia, y pasada esa etapa a duras penas hacer una película sin diálogos ha sido una opción estética que haya considerado el cine para la gran audiencia, como sí ha sido el blanco y negro, por ejemplo.
Poquitas cosas justifican para mí el silencio en "The artist", hay algunos gags espléndidos, además del fulgurante inicio, la pesadilla de los sonidos, la sombra huidiza,... pero en el resto de la película la opción no aporta demasiado o no aporta lo suficiente, a veces parece más un rasgo distintitvo necesario para camuflar que es una historia que picotea demasiado de otras historias, y a veces debería copietear más literalmente (funciona mejor que la estrella en declive y la ascendente estén casados desde el primer momento).
"The artist" es visible y agradable, incluso cuando es caprichosa y cuela a Bernard Herrmann como un pastel en la cara del espectador. Estéticamente es un juguetito tan bien resuelto como caprichoso, y argumentalmente de nuevo es caprichosa y casi no es nada, y no quedará nada de ella salvo la labor antológica de Jean Dujardin (premio en Cannes que es capaz de engañar y confundirse con el mismísimo Douglas Fairbanks y capaz de que aceptemos que no es James Mason) y esa mujer de extraño atractivo llamada Bérénice Bejo. La pareja recluta en exclusiva alma y sentimientos de la película, que le debe absolutamente todo a ellos.
Aún no la he visto, le están dando tanto bombo que tengo mis dudas, y no te he notado muy entusiasmado. Sí parece que la pareja tenga mucho ángel, ya te diré, pero me apunto tu crítica. Un abrazo.
ResponderEliminarFelices fiestas
Pues eso, muy decorativa, y todo muy en su sitio, que parece que la audacia se acabó con lo de poner letreritos y hacerla muda, el resto es gratificación a mansalva para el espectador, que para eso se han gastado un montón de pasta en hacerla. Coincido en que se olvidará tan pronto termine de recaudar lo que le caiga por los Oscars.
ResponderEliminarIsabel, mejor gratis, y si no la has visto, "Ha nacido una estrella" con James Mason y Judy Garland. Efectivamente no tiene mucha más audacia que "ser muda".Felices Fiestas. Un abrazo
ResponderEliminarMe imaginaba que sería parecida a la que dices, por lo menos el argumento. Jeje mejor gratis, me esperaré entonces, es que cuando hablan de ella por la tele y preguntan a las señoras que salen del cine, todas que dicen que qué bonita y que el prota las ha enamorado y me da un pufo...
ResponderEliminarUn abrazo.