-Tantos esfuerzos para Sokurov y compañía te han tumbado.
-¿Te ha gustado?
-Sí, mucho.
-El personaje de ella está maravillosamente interpretado.
-Es una pena que Miriam Hopkins no sea más célebre.
-Está lo suficientemente inmensa como para que una pueda comprender perfectamente que los 3 personajes masculinos de la película se enamoren de ella. Puede enamorar a tres tíos en una película y robarle a su hija a una mujer en otra y quedarse tan pancha.
-Es una mujer bella, inteligente e ingeniosa, como lo fueron las de Howard Hawks.
-Aunque cuando les conoce se convierte prácticamente en su madre, les cuida, guía sus pasos por el mundo artístico y les cose los botones.Cuando la relación entre este brillante trío parece fracasar ella se casa inmediatamente con su jefe convirtiéndose poco menos que una mujer florero.
-Ella dice que casarse con él ha duplicado la facturación...y que si se separa se puede triplicar...Él es, cómo no, Edward Everett Horton.
-Una mujer moderna en lo personal, lejos de los ángeles dulces, femeninos, delicados y obedientes de los cincuenta pero tremendamente atada en lo social a una serie de funciones respecto del hombre de las que aún no se ha deshecho.
-El inicio es increíble, la escena que más recordaba. Esos minutos sin palabras.
-Los diálogos son ágiles y divertidos y la trama no tiene meditas tintas. es increíble que una serie de personas cuarentonas consideren que jugar a animal, vegetal o mineral es la diversión de una fiesta.
-Faltaba un año para el código Hays pero Lubitsch nunca perdió la frescura y el espíritu libre.
-¿El código Hays prohibía jugar a animal, vegetal o mineral?
"DESIGN FOR LIVING" (Una mujer para dos) es una elegante y un tanto osada comedia, sí, aunque no en la medida de la audaz, punzante y divertida obra teatral en la que (sólo arquitectónicamente) se basó. La razón de este déficit, ajeno a los talentos y voluntades de Ben Hecht y Ernst Lubitsch, fue probablemente la censura ejercida por las entonces emergentes Ligas de Decencia que obligaron a limar del guión todas las aristas de situaciones y diálogos que “arañaran” la moral, hasta dejarlo bastante romo en las partes más visibles.
ResponderEliminarPese a los esfuerzos y malabarismos de los talentos implicados, la cinta, en cualquier caso, ya digo, brillante y atrevida, se quedó tal vez no a medio camino, pero sí a unos centímetros de poder tocar el techo de sus posibilidades.
Nada que objetar a la estupenda composición de Miriam Hopkins, pero un servidor hubiera disfrutado más con una Carole Lombard. Se presta más para un "menage à trois".
Un saludo.
Muy curioso, no lo sabía que ya había tenido sus problemas de censura, ni que la obra de Coward fuera más audaz. En cuanto a Carole Lombard mira que la adoro, pero creo que no me gusta más que Miriam Hopkins en ningún sentido.
ResponderEliminarUn saludo
Yo no conozco la obra original de Coward y no sé cómo de suavizada está, pero a mí me sorprendió la audacia de la película incluso para ser de la época pre-código, sin tener la sensación para nada de que se quedaba corta.
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