lunes, 28 de enero de 2019

UN VERANO CON MONIKA

Hay que ver cómo cambiaron las películas de Bergman con los años. Cuánto se puede saber sobre Suecia y la vida de los suecos viendo la muy neorrealista  "Un verano con Monika" (1953), con sus densas pinceladas de Renoir hijo, y qué poco hay de eso veinte años más tarde. Al menos que yo recuerde.

Se puede hablar mucho de Harriet Andersson, con lo que no concuerdo es con las lecturas moralistas que se han hecho de la película ni con la visión destructiva del personaje de Monika. Simplemente la inmadura y la irresponsable en este caso es la mujer y eso también es una forma de emancipar. Una madre puede ser así. Claro que puede. 

Esencialmente me parece una película sobre la confrontación entre el placer y los rigores de la vida real o la vida en nuestro sistema familiar y productivo. Es un trance vital por el que hemos pasado muchos y la película es verdaderamente auténtica y equilibrada en ese sentido. Honesta, sin mentiras en ningún sentido. 

De aquella etapa siento verdadero amor por "Juegos de verano" pero sin duda "Un verano con Monika" es una película extraordinaria.



2 comentarios:

  1. Retrato sobre la inmadurez en un país bastante conservador y moralista.

    ResponderEliminar
  2. No consigo imaginar a un Bergman advirtiendo a los jóvenes sobre los riesgos del placer. Si la película quería decir solo eso es para echarla a la hoguera, jeje...

    ResponderEliminar