The great Gatsby
Francis Scott Fitzgerald, 1925
Edicions 62, 223 páginas
Es admirable que en poquísimas páginas Fitzgerald sea capaz de condensar todo el retrato de una época por el que es célebre. Es como si su novela popular ya la hubiesen leído todos los que saben algo de la aureola twenties del escritor y aún así su carácter quintaesenciado se queda muy corto si sólo te lo imaginas.
Romántica, melancólica, concisa y brillante como una canción de Cole Porter, es tan tópica y manida como imprescindible descubrirla. Y concluye con explícita lúcidez: la tragedia de los seres que avanzan intentando atrapar el pasado. Es el reverso triste de aquel esplendor en la hierba de aires fitzgeraldianos que sin embargo sí avanzaba hacia un futuro.
Off topic o comentario fuera del tiesto, supongo, pero ví hace poco la excelente versión de esta novela rodada por Elliott Nugent y recordaba ahora al que rodó para TV Franklin Schaffner con el mejor Gatsby posible, Robert Ryan.
ResponderEliminarLa de Nugent es la de Alan Ladd y la de Schaffner no la tenía clichada. Leí que hubo una justo después de la publicación pero se perdió. En facebook comentamos el tema de las versiones a raíz de esta entrada, personalmente no contemplo mucho el concepto off topic (siempre que tenga remotamente algo que ver con los libros o con la obra en cuestión).
ResponderEliminar