Esta noche han invitado a su amigo David Cronenberg, que siempre les ha gustado pero nunca acabaron de creer que pudiese formar parte de esa masonería de la puesta en escena de espejos y espacios fríos, de cuerpos heridos por el fuego o por la vida, de espectros, de esa masonería del melodrama postmoderno follestinescamente sublimado.
Ven "Maps to the stars". Lynch aplaude en varios momentos. Almodóvar mantiene la boca abierta durante toda la proyección. Algunas composiciones del espacio hacen aflorar en Brian lagrimitas de orgullo. El mecenas Saïd Ben Saïd brinda por el grupo.
La logia tiene un nuevo miembro. Al acabar la proyección todos depositan sus bastones de mando a los pies de Cronenberg y se arrodillan en señal de respeto. No creían que pudiese pasar algo así tras "Un método peligroso". Los fans de Cronenberg preferirán otras películas, pero "Maps to the stars" es la obra maestra que los ha unido y hermanado para siempre a estos magos de la imagen, como se unen para siempre dos de los personajes en su plano final.
En siete días volvemos con otro programa doble. Esta noche aplaudo en pie "Maps to the stars".
Absolutamente de acuerdo. Yo no lo hubiera dicho mejor.
ResponderEliminarPues no sé yo si Almodóvar y Lynch invitarían a nada a Cronenberg, después de que éste manifestara su odio por Todo sobre mi madre y The straight story cuando se pasaron en Cannes (1999) y el canadiense era director del jurado, con lo que dejó a los dos favoritos compuestos y sin palma, que fue a caer a Rosetta (y a L´humanité también le cayó un buen pellizco); cuentan en los mentideros cinéfilos que las heridas todavía escuecen.
ResponderEliminarjajaja, yo esperaba que puestos a reprochar la verosimilitud de la historia os íbais a meter con el inverosímil vestuario masón, pero los comentarios siempre son una fuente de sorpresas y de información inesperada. No recordaba ese Cannes, la verdad.
ResponderEliminarDisiento en todo querido Sergio, esa logia esta mas caducada que los yogures que deje en la nevera antes de irme de vacaciones, pero claro, como dijo el ministro, se pueden comer después de la fecha porque no sientan mal ni hacen daño, ni bien alguno dicho sea de paso salvo alimentar el hambre cinefila....😃😃😃😃😃😃
ResponderEliminarAún no ves el quid de la cuestión, querido Miguel, porque precisamente me acordé de ti al escribirlo. En realidad no disientes, tú los odias a todos por igual, por lo que compartes perfectamente que pertenecen a la misma logia. Que la mirada sea positiva o negativa es puramente anecdótico, jeje.
ResponderEliminar😃😃😃😃
ResponderEliminar