D'A 2020 (Primera parte)

HABITACIÓN 212.Demasiado bien empiezo. Divertida, melancólica, imaginativa, arrolladora, con una narrativa donde cualquier orden o código salta por los aires, para suerte de los que detestamos el orden y los códigos. Este "Cuento de Navidad" con muchos fantasmas en la habitación, este Don Juan femenino deja un mal pronóstico para los siguientes días, que prometen bajón. Chiara Mastroianni, como siempre, está sensacional en todos los sentidos.

ROUBAIX, UNE LUMIÈRE.Es en su falta de virguerías narrativas y sorpresas la película más sorprendente que podía deparar la trayectoria de Arnaud Depleschin. Más atípica incuso que "Jimmy P.", se trata nada más y nada menos que de un contundente "police procedural", creo que lo llaman así, donde aunque puedan rastrearse las ya habituales dos mitades, en este caso no están en absoluto dislocadas sino que se suceden con una progresión y una coherencia de acero.Es una muestra de género con trasfondo social pero centrada en lo minucioso de su subgénero, que está espléndidamente filmado, y donde la única limitación puede estar en las propias apetencias del espectador a la hora de contemplar el desarrollo sumarial de un caso. A mi no me entusiasma la idea pero no tengo ni una sola pega que ponerle.

LITTLE JOE. Ojo que la información relevante viene en la primera frase. "Little Joe" se puede ver en filmin hasta mañana lunes 4 de mayo a las 23.59.Aunque en la plataforma ponga "hasta el 5 de mayo".Peli con un guion interesante en su concepto, la estructura narrativa de los "ultracuerpos" donde la alienación es la idea de felicidad.A pesar de esa buena base, y de que verse se ve, a mi cinematográficamente no me ha matado tampoco, por esa turbación de cine austriaco que a mi me parece cada vez más de mentira, aquí basada en la frialdad estética y geométrica del laboratorio, suaves y muy repetitivos travellings (demasiado) y música japonesa (o de canicas cayendo al suelo), turbación de postal mezclada con esa rara esterilización visual que le da las películas el dinero de las loterías inglesas, que vienen a ser casi como el netflix del continente.