sábado, 24 de septiembre de 2011

NO HABRÁ PAZ PARA LOS MALVADOS

Extraña opción la tomada por Enrique Urbizu y el guionista Michel Gaztambide. No sé si la más acertada, la que condena a la película a una cierta grisura desaprovechada o la que la convierte en una apuesta personal y valiente, arriesgada.

Empiezan con el acto neurótico y violento de un policía borracho pero renuncian al film psicológico. Esa neurosis violenta no está desarrollada como tal, como la golosina irresistible que significaría para cualquier guionista.

La película se va hacia el terreno de la investigación policial fría y rigurosa, desembocando en una evocación abstracta y misteriosa del 11-M. Todo ese psicologismo goloso hay que adivinarlo y desarrollarlo a solas tras la trágica y fatal historia que descubre y venga el desquiciado policía.

José Coronado no me gusta, me desconcierta. Tiene una pinta tremenda, pero para ser un personaje tan tétrico, borracho y desquiciado, nos sigue ofreciendo su reluciente dicción, digna del aprecio y la confianza del público. Eso, que voz y careto no casan. Algo habría que haber hecho con esa voz, aunque la tentación más facilona hubiese sido imitar al Luis Tosar de "Celda 211".

La película no me gusta mucho, o no lo suficiente, me parece a pesar del lance un poco sosa, fría y gris, en su tono (y como si todo el reparto estuviera elegido así a conciencia), pero para ser la película española del otoño, ni de lejos va por las caminos calculadísimos y agradecidos que suelen ir aparejados al éxito. Se mete en camisa de once varas. Se hubiese agradecido alguna concesión más al personaje, algún pequeño exceso, o una mayor garra visual, mayor pálpito en sus imágenes sosteniendo la apuesta, pero bravísimo por lanzarse a esta especie de thriller fantasma, que no se parece a ninguna fórmula que conozcamos por aquí.



5 comentarios:

  1. mira que algunas de las cosas que dice de la peli son precisamente de las que más aprecio, eh... Por cierto, que yo creo que sí se encargan de que el personaje tenga sentido en su forma de hablar, no deja de ser el numero uno de su promiciòn y es obvio que en un pasado el propio personaje de juanjo artero lo apreciaba/admiraba, lo cual no parece posile si no tuviera dos dedos de frente.

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  2. Por eso decía yo que no necesariamente había que ir por la opción "Celda 211", sólo pensar algo que cuadrara más con lo desatado mentalmente que anda el personaje. Es que siempre me pareció que Coronado tiene un muy agradable tono de voz, y eso es todo un problema ante tanta sordidez jeje.

    No, la peli merece la pena de verdad, era por buscarle un poco las cosquillas, ahora que el stablisment patrio ha amanecido esta mañana frontalmente en contra de Lacuesta y a favor de Urbizu. Pero el mismo sábado por la tarde me daba pena leer en El País que Frances MacDormand descartaría a Urbizu por un "qué nos van a contar a los americanos de policiacos", como si allí el género pasara por un buen momento.

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  3. Yo creo como tú en que el personaje ha de tener toda la envoltura sino defallece por más que la parte física sea muy buena, imaginemos un Travis Bickle con una voz inconveniente frente al espejo, sería una parodia de sí mismo, una mala broma, si hay algo que desentona en un molde se pierde la credibilidad, los detalles son indispensables para el buen acabado de un tipo, escuchemos nomás la incomodidad que genera la voz de Lecter, no es necesario un único registro pero que moldee la imagen, es cierto que en el caso de Celda 211, Tosar suena raro pero termina siendo creíble al pasar el metraje. Y a ver si puedo verla, que el cine español me gusta bastante. Un abrazo.

    Mario.

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  4. La ves y a ver qué te parece José Coronado. No sé si lo habéis visto en más películas y si las de Urbizu han circulado al otro lado del coéano.

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  5. nuevas películas españolas. siento como si ya estuviera en el año 2012.

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