No ya por supuesta "autoría", que no intuyo, sino por una elegancia, belleza, solvencia y efectividad para el cuento de terror que hace frotarse las manos por lo que pueda venir. Como mucho discípulo, que no imitador, de Shyamalan.
"La bruja" ha conseguido fascinarme e inquietarme. Además de parecerme una cruel radiografía de la institución familiar. Parecía que luego venía "Nosferatu", un proyecto que le viene al pelo a este yanqui con sensibilidad centroeuropea. Las informaciones no son tan claras. Hay otro proyecto con Willem Dafoe y un faro. Yo lo sigo viendo en el terror, que lea literatura y no se emperre con guiones originales. Puede haber largo recorrido.
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