lunes, 13 de agosto de 2012

BRAVE

Ha llegado ya el momento en el que el viejo tema Pixar independizado o no de Disney ha dejado de tener sentido. Uno asiste estreno tras estreno a la última obra de los estudios, y ya a penas se plantea que Disney afecte de alguna manera al resultado final. Pixar es el nombre sobre el que giran las expectativas, Pixar es la estrella, Pixar es el autor. Es verdad que"Brave" aparentaba cierta disneyzación, pero es un film absolutamente de Pixar.

Hay una carcasa, un algo de fórmula estudiada a la que tampoco escapa "Brave", una intención repetida obras tras obra de contentar por igual al público más infantil y dar algo que degustar al público adulto que les acompaña. Pixar es industria y no parece avergonzarse de ello, pero vayamos ya sin más prolegómenos al núcleo de la cuestión.



"Brave" me parece excelente e inspirada. Magnífica película. Se trata de un cuento protagonizado por la princesa Merida en la que no hay príncipe ni historia de amor alguna, pero eso no es una virtud en si misma, hay que notar también que:

-No resulta forzadísimo como muchos cuentos políticamente incorrectos. La subversión no está metida con calzador. Merida simplemente quiere ser libre, decidir, vivir como a ella le gusta, y eso lo explica la película con absoluta naturalidad.



-Tiene detalles muy hermosos, como un inteligente respeto por los valores de la generación anterior, como quizás sólo había visto yo en "Esplendor en la hierba". La princesa se rebela contra su madre, que sigue siendo su madre a pesar de lo abominables que le puedan resultar sus valores. Supongo que quien más quien menos ha vivido eso con familia o personas cercanas. Las personas son más que sus valores y nos unen a ellas más que sus valores, y no por ello cede o devalúa sus sentimientos, pero la madre no es "la mala".

-La princesa espera que su madre cambie. Y eso no es posible por arte de magia. Es necesario creer más en la propia capacidad de actuación que en la posibilidad de que sean los otros los que cambien.La película finalmente deja centrada toda su moralidad y toda su magia en el poder de los seres humanos para actuar.

 

Existe esa moralidad, esa intención de aleccionar, pero existe a través de unos planteamientos válidos, humanistas, creíbles, congruentes consigo mismos y positivos.

Siendo una película que llama la atención como fábula verdaderamente excepcional en la animación industrial USA (ya no tanto a medida que Pixar sigue trabajando), no deja de ser también un film prodigioso donde la acción avanza con fluidez y mesura, con música de ¡Patrick Doyle!, sin cargar las tintas en largas e inacabables secuencias de acción, ni en secundarios de discutible gracia (aquí unos gemelos utilizados mesuradísimamente también).

Rotundo el trabajo de "Brave", compactado, espectacular, aliadas brillantemente forma y fábula en un film verdaderamente bello, sin transgresiones hipócritas como las de "Shrek", sin transgresiones de hecho, porque habla con sencillez de sentimientos y valores que de hecho no deberían ser transgresión alguna.



3 comentarios:

  1. Lo olvidaba, parejo a mis buenas vibraciones con "Brave", comentar mi más absoluta decepción con "La luna", el corto que precede a la película. Ponga en el horno una bandeja de poética grasienta y facilona, déjela a temperatura máxima y despístese hasta que la bandeja se churrasque. Al departamento de cortos a veces le falta algo más de chispa y menos manuales de métrica rancios de poesía infantil.

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  2. Yo creo que me voy a poner del lado de la madre (como en la Carta al padre de Kafka, en la que se notaba que el tío pesao era el hijo).

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  3. Jajaja, sí, es una posición saludable.

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